Shari se va y yo le voy a mandar postales

Mucho se dijo sobre la amistad entre las mujeres, entonces no quiero caer en el lugar común o en la frase hecha. Se sabe que hay una complicidad que excede montañas porque tenemos la capacidad de hablar de todo, sin filtros ni tabúes, de escuchar aunque tengamos las orejas taladradas y de hacer análisis minuciosos para cada escena. Con determinadas personas, la palabra “amiga” se borra, pierde el foco, y se convierte en “hermana”. Y con el paso de los años también vamos permitiendo definiciones más laxas, porque entendemos que cada una tiene su tiempo y a veces las etapas en las que estamos inmersas no coinciden. Al menos desde mi lugar, no busco amigas que sean superheroínas, porque a veces la vida no nos deja serlo, o directamente no podemos; somos humanas. En definitiva, una amiga es aquella que te deja volar, no quien te tiene agarrada de una correa.

Y es también quien te dice, sin caramelos ni sobres de edulcorante, lo que tenemos que escuchar cuando queremos alejarnos de verdades que duelen. O la que te acompaña a la guardia de un hospital en pleno día de verano por razones que violan todo tipo de reglas sobre lo que se puede publicar o no en las redes sociales. También es la que se ríe desquiciadamente de los papelones que hacés y se ocupa de que no los olvides nunca. Es la que te mira con ojos honestos, la que te empuja a una meta que no creías posible y la que te deja verla llorar en los confines de un auto, porque no hay mayor intimidad que esa.

Hola Shari, te hablo a vos. 

*

pac16.2

Gracias Victoria Gandulfo por las fotos.

Que amistad versátil la nuestra, ¿no?

La llevamos de un pupitre en la clase de CCC, mientras todos repetían como un eco insaciable tu nombre – quizás porque se quedaron atónitos de cómo pronunciaste “Sharon”, con esa “r” algo silenciosa – a un estudio de radio, a una página web que quiere ser blog y viceversa, a miles de cafés y licuados y algunos vinos y un etcétera interminable que cobija charlas sobre la vulnerabilidad, sobre el hambre que tenemos de vivir y el miedo que tenemos de que algún día no esté más, sobre la muerte y el sentido que tenemos que encontrarle a todo porque es el único salvavidas que tenemos.

Y ahora te vas y no va a ser fácil, y asumo el egoísmo de decirte esto. Pero quedarte acá sería tenerte totalmente desganada, porque ya  tenés un marcador rojo en la mano, lista para hacerle un gran tic sobre la palabra “Buenos Aires”, un capítulo que – al menos ahora – está terminado. Te vas con la seguridad de que podés cerrar la puerta y mirar hacia adelante, con la intuición y la curiosidad como tus brújulas. Te vas con un amor genuino esperándote del otro lado. Y por sobre todo, te vas con la certeza de que no podrías estar en ningún otro lugar porque sino, ¿cuándo vas a cumplir el sueño que te empuja desde tu adolescencia?

¿Me dejás ir los sábados igual? ¿A charlar en la cocina con Lor y pedirle consejos de qué contestar para no quedar tan entregada, o de pispear las andanzas de Denchu? Mientras tanto podemos hacer skype, vos con tus auriculares blancos que parecen orejas de conejo y yo con la pantalla apagada porque la tecnología siempre me termina superando, mientras seguramente esté haciendo otra cosa, porque soy así, colgada.

Creo que, antes que todo, PAC es una excusa para nosotras; para juntarnos a tener “reuniones”, para escribir de lo que necesitemos desahogar, para tener la licencia de sacar nuestra verdadera ridiculez y divulgarla por las redes. PAC nos mostró una gratificación que no sabíamos que existía, nos conectó con personas – algunas anónimas y otras no – de una forma que no esperábamos; nos enseñó a escribir y a escuchar. Escucharnos.

*

No mires atrás. No pienses que no podés ni que no sos suficiente. No desconfíes ningún minuto de tu esencia que te empuja como el viento. No pierdas de vista los detalles de la vida ni sueltes los pinceles o lápices que sean las vertebras de tu creatividad.

A volar Sharita, ¡a vivir! Acá te esperamos para ser los testigos de tus aventuras.

2 comentarios en “Shari se va y yo le voy a mandar postales

  • Contestar Mechi 14/03/2016 at 2:38 pm

    Que bien descripta esa lindísima amistad 🙂

  • Contestar Jorge 15/03/2016 at 3:44 pm

    Genial…

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