Mis amigas están pensando en casarse o se están mudando con los novios. La mayoría trabaja para tener plata y no para crecer ni porque les interesa lo que hacen. Me falta un año para terminar la facultad y me siento en desintonía porque yo quiero hacer miles de cosas antes de asentarme. Además, cuando decida hacerlo, quiero que sea por una elección y no porque pasó el tiempo y era lo que había que hacer. Son mis amigas de toda la vida y es rarísimo. ¿Cómo aceptar que las personas más cercanas a mí tienen objetivos TAN diferentes a los míos? — Delfi
Cuando terminó la facultad, mi hermana mayor consiguió su primer trabajo “serio”. Su nueva etapa empezaba al mismo tiempo que la mía llegaba a su fin: era mi último año de colegio y a pesar de que empezar la universidad me entusiasmaba, quería más que nada estar en el lugar en donde estaba Jeanine. Colegio —tic—, facultad —tic—, con el mundo por delante. Libre al fin.
Con esa libertad, mi hermana eligió trabajar en una empresa multinacional (que tomé como una afrenta personal) y que además era petrolera (segunda afrenta). De lunes a viernes vestía ropa especial que cumplía con los requisitos de la compañía, como remeras con mangas (los hombros no podían ir desnudos) y zapatos que cubrieran todos los dedos del pie.
Con todas las decisiones que podía tomar, mi hermana elegía ese trabajo, esos colores y esas rutinas.
Y a mí me ahogaba.
Una noche volvió a casa con un par de zapatos que había comprado a 100 pesos en una feria. Se los mostraba a Loreta, mi mamá, en la cocina: eran de taco bajo, un charol tornasolado entre marrón y negro, con una flor rígida y tenebrosa en la punta. Jeanine estaba feliz y era inentendible. ¿Cómo podía estar contenta con zapatos tan ajenos a ella, que había comprado para un trabajo que solo la aceptaba si se vestía de cierta forma? ¿No veía que estaba perdiendo su identidad un día a la vez? ¿Qué uso de libertad era esa?
Al escribir esto me avergüenza admitir lo mucho que me afectaron un par de zapatos. Pero esos zapatos de vieja me hicieron saltar la chispa porque eran para mí el símbolo de la alienación; la representación física del mundo corporativo que yo odiaba y que estaba aspirando la identidad de mi hermana. Me daba miedo que el estilo de vida de Jeanine fuera el único que existiera porque no era el que yo quería.
Loreta una tarde me preguntó qué me pasaba (a este punto mi maltrato hacia Jeanine era incontrolable).
—¡Estoy enojada con Jeanine! — Le confesé mi envidia hacia su libertad de elegir y mi rabia porque esas elecciones no eran las que me gustaban.
—Sharon. Es su vida. Es un trabajo excelente, lo hace bien y está muy contenta. Dentro de poco se va a mudar sola. ¿No ves que es algo para estar orgullosa?
No hagas lo que hice yo.
Tu situación es situación similar a la que te conté recién: estás atada todavía a la facultad, y ves cómo tus amigas —que ya la terminaron— toman pasos en una dirección que a vos no te gusta.
Dejame ser tu Loreta y decirte tres cosas importantes:
1. TODO ESTILO DE VIDA ESTÁ BIEN.
Que sean diferentes al que vos aspirás no significa que sean malos ni incorrectos, siempre y cuando sean frutos de un proceso consciente.
El trabajo de mi hermana la ayudó a comprarse un auto, a mudarse sola a los 24 y a comprarse una casa a los 29, sin hablar de la carrera que tiene que es envidiable. Yo, con los 24 años que tengo, estoy lejos de comprarme una bici — pero esas son las consecuencias de mis decisiones y de las cuales estoy orgullosa.
Lo necesario es conocerte a vos misma, saber por qué elegís lo que elegís y distinguir entre si te nace de adentro o la sociedad (o la fiaca) resuelve por vos en automático.
No proyectes tus ambiciones en tus amigas y después te enojes con ellas porque no las cumplen. Sus aspiraciones no son las tuyas. Sus vidas no son la tuya. Tu momento va a llegar y lo mejor que podés hacer es prepararte para cuando llegue: armate un repertorio de herramientas útiles.
2. NO HACE FALTA TERMINAR LA UNIVERSIDAD PARA EMPEZAR LA VIDA QUE QUERÉS.
Mi error —además de proyectar en la vida de Jeanine— fue pensar que la vida real empezaba después de la universidad.
EMPEZÁ YA.
Sos joven y no tenés que alimentar una familia ni mantener a tus abuelos. Aprovechá esta etapa para explorar y tomar riesgos porque más adelante será más difícil.
* Escribí el estilo de vida al que apuntás. Los objetivos a los que me aludiste en tu mensaje. Los valores alrededor de los cuáles querés que orbite tu vida.
* Tomá acción. Los elementos de la lista anterior se cumplen solo si tomás un paso y después otro y después otro en esa dirección. Si querés viajar, ponete a ahorrar ahora, uno o dos o tres años antes. Si tu sueño es ser cantante, practicá una canción por semana, grabate y publicala en internet. O si tu objetivo es escribir, creá un blog y posteá una vez por semana.
Planeá —de manera flexible— pero planeá, porque con un plan de acción te vas a sentir menos a la deriva. Apuntá hacia actividades concretas que puedas llevar a cabo y que te den control. Buscá tus anclas y dales peso.
* Cultivá la paciencia.
Todo lleva tiempo. Tal vez te frustra seguir en la universidad ¡pero te queda tan poco! Ser paciente es la mejor ventaja que tenemos en un mundo competitivo en el que todos tiran la toalla al no conseguir éxito después de seis meses.
1 video x semana = 52 videos en 1 año de vos cantando que podés mostrar como portfolio, o a través del cual otros puedan encontrarte para entretener en un evento, formar parte de una banda o grabar un jingle.
Además, el tiempo pasa rápido. La experiencia de ser estudiante es un regalo y es difícil que se repita. Ya casi estás. La línea de llegada está ahí adelante pero todavía falta el último trecho… Saborealo. Mirá la facu con ojos de alguien que no va a volver: aprovechá a tus profesores, quedate después de hora, guardate el contacto de todas las personas que conociste y cruzá camino con las que todavía te intrigan.
El recurso más importante de la universidad es la gente que conocés porque tienen tus mismos intereses—no dejes que se vayan así nomás.
Y agradecé la oportunidad de estudiar porque es un privilegio al que no todos tienen acceso.
3. NO HAY UNA SOLA FORMA DE HACER LAS COSAS.
Todo a tu alrededor a lo que llamás vida fue creado por personas no más inteligentes que vos.
Steve JOBS
Hay una sola forma de vivir si dejás que esa sea tu cosmovisión. Mundos hay miles y vos podés armar el tuyo como quieras.
Si no tenés en claro cuáles son tus objetivos, tomalo como una oportunidad. Pensá en las elecciones de tus amigas e identificá qué es lo que te hace ruido. Saber lo que NO querés es igual de importante que saber lo que SÍ querés. El rechazo puede ser el lugar más fácil por donde descubrirlos.
Si ya sabés, empezá. Por suerte existe internet y conocemos otros estilos de vida que antes no sabíamos eran posibles. Internet no es solo una vidriera para ver realidades diferentes, es también una PLATAFORMA sobre la cuál podés crear la tuya. USALA.
Equivocate. Hacé el ridículo. Probá. La inacción no es una alternativa.
*
Sentir las grietas entre vos y tus amigas duele pero separarse es necesario y sano. Al descubrir qué es lo que hace que seas 100% vos, podés llevar esa energía que es solo tuya al grupo y enriquecerlo. En lugar de un grupo homogéneo, inmóvil e infertil, vas tener uno que elige seguir juntándose y creciendo con los puntos de vista diferentes de cada una.
*
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1- Recuerdo perfectamente esos zapatos HORMENDOS (horribles + tremendos)!!!!! Difícil olvidarlos.
2- Error: Nini se fue de casa a los 25. Yo le gané con 24, darlingggggg.. Meteme en tu lista de “women I admire”.
3- No tendrás para la bici pero ya tenés casco de moto! 🙂
1- Recuerdo perfectamente esos zapatos HORMENDOS (horribles + tremendos)!!!!! Difícil olvidarlos.
2- Error: Nini se fue de casa a los 25. Yo le gané con 24, darlingggggg.. Meteme en tu lista de “women I admire”.
3- No tendrás para la bici pero ya tenés casco de moto! 🙂
Hola!!! Justo hoy pensaba que me siento triste por la misma situación, mis amigas o amigos están en otras ciudades y yo estoy empezando en una nueva… varias de ellas ya se están casando, con hijos, y a mí nada que se me antoja, sino seguir descubriendo el mundo, como dar clases de inglés, aprender a dibujar, viajar fuera de México y conocer lugares lindos. Me encanta todas las ideas que das para hacer nuevos amigos igual y ya hasta había llegado al nuevo blog, también quisiera escribir, pero no sé mucho como armar un blog. Me gustan mucho tus blogs por sencillos, la tipografía es clara, elegante y hermosa. Y que no tiene muchos dibujos. Quisiera que podamos seguir en contacto y sigue escribiendo tan lindo. Eres un ejemplo a seguir. Saludines, Mar desde México!
Hola Mar! Perdón que tardé en contestar, no paso por acá tan seguido como antes.
Muchísimas gracias por tus palabras tan lindas! Separarse es siempre difícil, y lo vamos a sentir durante toda la vida. A medida que me hago más YO, me voy separando más de los OTROS. Pero lo bueno es que después cuando te reunís, cada uno aporta de su parte y el encuentro es más rico.
Yo también quiero seguir viajando! Y planeo hacerlo durante mucho tiempo más.
Y si querés armarte un blog, no te preocupes, que se puede aprender todo por internet. Así fue como aprendí yo. Hay tutoriales para todo, solo necesitás un poco de paciencia. Podés empezar por acá:
https://viajandoporahi.com/10-cosas-que-deberias-saber-antes-de-empezar-un-blog-de-viajes/
Beso y suerte!
De los mejores post que he leído, pues cada vida y cada rumbo es totalmente diferente al nuestro, lo que quiere uno, no lo quiere otro y eso está bien.
Gracias por compartir.